En el año de 1982, el Dr. Alfredo Colón Hinojosa, médico retirado del mundo empresarial, siguiendo su sentido altruista hacia los adultos mayores, deseoso de contribuir a su bienestar, se da cuenta de las necesidades de esa población desatendida. Al momento de su jubilación o al llegar a una etapa avanzada de la vida, la mayoría de los adultos mayores ven modificado su estilo de vida y sus relaciones interpersonales.
Anteriormente, se creía que al momento de llegar a la vejez ya no se tenía vida, que ya no se podía trabajar o realizar actividades interesantes; sin embargo, esa idea no tenía cabida en el sentir del Dr. Colón, que quería transmitir a las personas mayores el entusiasmo por la vida y las ganas de tener un mejor porvenir. Así pues, el Dr. Colón comenzó a realizar reuniones con sus amigos, invitando a la comunidad de la tercera edad a convivir con ellos, propiciando un ambiente cálido y haciéndolos sentir que sí hay una vida interesante después del retiro o al llegar a una edad avanzada.
Su distintivo principal, es el de integrar actividades recreativas y lúdicas, permitiendo al adulto mayor disfrutar y demostrar sus capacidades y fortalezas en diferentes actividades como en el juego de dominó, el baile, la plática sobre temas variados, la vida cultural, la lectura, la música y los trabajos manuales.
Es un concepto novedoso de alto nivel, cuyo objetivo es dar a un sector de la tercera edad, un ambiente exclusivo y afín a sus intereses, sin separarlos de su vida social, en una atmósfera de seguridad y tranquilidad, teniendo la libertad, paz e intimidad de su propio hogar.
Proporcionamos a nuestros residentes un hogar en donde se sienten tranquilos, felices, seguros y bajo un régimen de vida totalmente libre, en donde pueden residir de manera permanente o asistir solamente durante el día, pueden entrar y salir cuando lo deseen y pueden ser visitados por sus familiares y amigos sin restricción alguna, pues contamos con seguridad las 24 horas del día los 365 días del año.
Mantenemos siempre un contacto estrecho y permanente con los familiares de nuestros residentes, tratando de integrarlos a su vida dentro de la residencia, fomentando un acercamiento mutuo de manera que el residente no se sienta rechazado o relegado de su familia y a la vez tenga la tranquilidad de no ser una carga para nadie.
“Proporcionar a los adultos mayores bienestar y una vida digna en un ambiente familiar, ofreciendo un servicio integral de alojamiento, alimentación especial e interacción sociocultural de alta calidad, en un lugar tranquilo, seguro y cálido, que les brinde las mejores condiciones de vida”.
“Continuar siendo la cadena de residencias para la tercera edad más importante del país, reconocida por la calidad de sus servicios, por sus instalaciones de primera, por el trato amable y el cariño que se brinda a los residentes, así como por su ambiente familiar, en donde los residentes y sus familiares se sienten como en su propia casa”.